Dos menores detenidos por grabar a otros a través de la Red para chantajearles.
15 de Noviembre de 2006
La Guardia Civil ha detenido a cuatro personas —dos menores— que grababan imágenes comprometidas de compañeros a través de Internet sin que lo supieran, supuestamente para chantajearles y coaccionarles bajo la amenaza de hacerlas públicas.
Es el 'eBulling', como lo ha calificado la policía. Acoso escolar a través de Internet. Los menores detenidos introducían virus en los ordenadores de otros y, a través de ellos, conseguían manejar de forma remota sus cámaras web, lo que les permitía tomar imágenes de forma clandestina.
Las investigaciones de la 'operación Praxis', desarrollada en Madrid y Alicante, comenzaron durante el pasado verano, tras la denuncia de una empresa informática del ataque a sus sistemas para sustraer información confidencial. La Guardia Civil logró identificar a uno de los sospechosos al que 'controló' durante meses.
Tras la detención de esta persona en Madrid, se pudo identificar a un menor de 17 años residente en Alicante —que también fue arrestado— como el principal sospechoso de este grupo y se registró su domicilio en la localidad de Crevillente.
'Carding' y 'eBulling'
Según la investigación policial, estas personas utilizaban tarjetas de crédito falsas, obtenidas a través de Internet, para realizar pagos de todo tipo. Estos robos de identidad y el uso fraudulento de tarjetas de crédito es la actividad que en el argot policial se conoce como 'carding'.
El análisis de los equipos intervenidos desveló que, junto a otro menor también detenido en la citada localidad alicantina, habían diseñado un plan para obtener imágenes comprometidas de otros alumnos y alumnas de los centros docentes de su misma localidad.
Infectaban a otras personas con las que mantenían contacto a través de Internet con un virus troyano creado por ellos que les permitía obtener el control remoto de las cámaras web de sus víctimas.
Con la información obtenida, coaccionaban y amenazaban a sus compañeros, llegándoles incluso a exigir determinadas cantidades de dinero para no hacer públicas determinadas imágenes de otros menores. Posteriores investigaciones permitieron detener a una cuarta persona, residente en Madrid, también experto en fraudes con tarjetas de crédito.
Durante meses llegó a ganar más de 60.000 euros comprando y revendiendo todo tipo de bienes que adquiría en Internet, como televisiones, ordenadores, jamones y lotería de Navidad.
Esta persona se valía del conocimiento informático de los menores para obtener información confidencial y poder emplear las tarjetas que conseguía por Internet. A cambio, los menores les daba pequeñas compensaciones como recargas de móviles (hasta 50 euros) y pagos de servicios de Internet.
fuente: EL MUNDO /www.mundo.es